El impacto de Internet de la Cosas en el medio ambiente.
El Internet de las Cosas puede ser un gran aliado del medio ambiente. Según un informe de A.T. Kearney, el desarrollo del Internet de las Cosas rebajará las emisiones de C02 en Europa en 200 millones de toneladas en 2025.
Esto supondría cubrir el 22% de lo que falta para cumplir el objetivo de reducción para 2030 anunciado este año.Europa tiene que cumplir el objetivo de reducir en un 40% las emisiones de gases con efecto invernadero, lo que equivale a una reducción adicional de 900 millones de toneladas de CO2.
El Internet de las Cosas plantea un entorno en el que los objetos pueden conectarse a Internet para recoger, enviar y recibir datos. Su adopción, según A.T. Kearney puede reducir las emisiones de CO2 al aumentar la transición energética y cambiar el mix actual de consumo energético.
En la actualidad, buena parte de la demanda de energía en Europa proviene de la vivienda e industria. En este sentido, la movilidad y la vivienda aportarían más de la mitad de las posibles reducciones de CO2 gracias a la incorporación del Internet de las Cosas.
La economía colaborativa con acciones como el uso compartido de los vehículos y la tecnología aplicada a los automóviles y a la mejora de la congestión del tráfico contribuirán con una reducción de las emisiones de 70 millones de toneladas de CO2.
Domótica Inmótica
Por su parte, el sector de la vivienda puede reducir las emisiones en 54 millones de toneladas. El Internet de las cosas, con sensores y control remoto de objetos conectados, sirve para optimizar los recursos al proporcionar un análisis detallado del consumo de energía: por ejemplo, la domótica permite una gestión inteligente de los sistemas de iluminación, calefacción, ventilación y aire acondicionado.
También habrá un impacto positivo por aplicar el Internet de las cosas a la industria, los servicios, las redes inteligentes (smart grids, smart cities) .