Probablemente habrás escuchado en multitud de ocasiones el concepto del internet de las cosas (conocido más internacionalmente como internet of things o IoT), una manera de conectar objetos de la vida cotidiana entre sí y, a su vez, con internet, a través de la nube, permitiéndoles convertirse en objetos inteligentes o smart-devices. La internet de las cosas como plataforma puede ser utilizada para hacer trabajar múltiples sistemas empotrados juntos con cualquier propósito.
Son muchos los ejemplos ya existentes y las posibilidades del futuro. Entre ellos podemos destacar cualquier tipo de monitorización a distancia, ya sea para un hospital, una plantación o un ascensor. Por este motivo, diversos analistas ya han pronosticado un crecimiento exponencial de estas oportunidades de negocio, sobre todo para startups. Gartner sugirió que en 2020 podría haber 25 billones de dispositivos conectados en el internet de las cosas.
Mientras conocemos más y más estudios con cifras astronómicas procedentes de varias multinacionales, una cosa es segura, el internet de las cosas ha llegado para quedarse, y en Microsoft son conscientes de ello. Tanto es así, que han desarrollado un kit de desarrollo de software (SDK) denominado Lab of Things y que está destinado para construir una plataforma experimental que ayude a estimular a los desarrolladores.
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En palabras de Arjmand Samuel, Senior Research Manager de Microsoft Research:
Lab of Things, gracias a el natural diseño de la plataforma, te permite innovar rápidamente, te permite probar un diseño, te permite ver tus ideas funcionar rápidamente en entornos reales, recabar datos, y entonces, poder vislumbrar si el diseño está funcionando o no, lo cual es una gran motivación para la innovación.
Microsoft ha tomado la iniciativa de su nueva plataforma, creando una solución dedicada al cuidado de la salud y a la prevención a través de sensores de movimiento integrados en la tela de la ropa para controlar objetos domésticos como luces y ventiladores. Un sistema como este puede ser muy útil para personas que sufren parálisis o poseen movilidad reducida, por ejemplo, en sus brazos para utilizar un tradicional interruptor. Los sensores capacitivos pueden detectar movimientos muy sutiles, integrados en guantes, bufandas, sábanas, etc., permitiendo a los usuarios controlar aspectos de su hogar sin demasiado esfuerzo.
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Arjmand Samuel también aclara que:
Lab of Things derriba las barreras de la investigación con objetos conectados, derriba las barreras permitiendo a la gente desplegar a escala, en diversos lugares, y ese es el poder de Lab of Things.
La plataforma está diseñada para que los desarrolladores puedan diseñar y construir sus soluciones sin complicaciones, y puede ser utilizada en multitud de casos de uso del internet de las cosas y proyectos de investigación. Esto puede incluir prototipos, salud y seguridad, gestión de energía, hogares, etc., y todo ello trabaja en conjunción con el sistema operativo de Microsoft para el hogar: HomeOS. Es una plataforma que no está limitada a los dispositivos basados en Windows y empieza a ser utilizada en la enseñanza por el University College London.