Madrid es una ciudad inteligente, una ‘smart city’. Para continuar avanzando en este camino y conseguir que sea más sostenible deben utilizarse las tecnologías de la información y la comunicación para mejorar los servicios urbanos y calidad de vida de los habitantes. «Son fundamentales y hoy en día tienen coste asumible por las instituciones», explicó Martí Solà, director general de la Fundación Gas Natural Fenosa. Solà y Carlos López Jimeno, director general de Industria, Energía y Minas de la Comunidad de Madrid, fueron los encargados de inaugurar el seminario, en el que se abordaron los principales avances que se han producido en este terreno. Cinco áreas de actividad urbana han sido las protagonistas por el importante impacto energético y ambiental: edificios públicos, la movilidad urbana, la gestión de los residuos, la gestión del ciclo integral del agua y la generación eléctrica descentralizada.

«El 70 por ciento de la población mundial vivirá en ciudades en 2025. Tenemos que hacerlas inteligentes», asegura Martí Solà. Todavía queda mucho camino por recorrer pero en ese camino hay que «ponerse objetivos», añade. Las administraciones deben «priorizar» para ver a qué se pueden destinar las inversiones. En este sentido, los expertos hablaron, a lo largo de las ponencias, de los recursos y posibilidades de las ciudades inteligentes.

La profesora del departamento de Transporte y Territorio de la Escuela Técnica Superior de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos de la Universidad Politécnica de Madrid,Rosa María Arce, destacó la necesidad de que las ciudades establezcan estrategias para adaptarse a los procesos de cambio. Algunas soluciones tienen que ver con las tecnologías de la información en las que participa el ciudadano. «Las tecnologías pueden mejorar el comportamiento ambiental de las ciudades analizando la contaminación y calidad del aire», apunta. Para ello, asegura la experta, debe haber una respuesta de los gobiernos «dando incentivos» para poner en marcha iniciativas. En este ámbito, la gestión de los residuos y del agua podría acogerse a soluciones sostenibles, como la instalación de sensores en los contenedores para saber si están completos o los que se utilizan en el encendido o apagado de las luces, para conseguir hacer una ciudad más inteligente.

Otro experto en la materia, Jesús María Daza, director general de la División Building Technologies de Siemens España, subrayó que mediante la tecnología se puedengarantizar ahorros de hasta un 30% en el gasto energético de un edificio. Así, destacó, se convierten en lugares sostenibles que generan y almacenan energía y son capaces de manejar su propia demanda y generación energética para minimizar el coste de energía y las emisiones del CO2. Daza, que lleva trabajando 30 años en esto, reconoce que apenas hay edificios inteligentes en España, si se compara con otros países. La buena noticia, afirma, es que hay tecnologías disponibles y soluciones que «hacen ver un futuro prometedor», como ocurre como los peajes dinámicos, las plantas de generaciones virtuales y el sistema de movilidad del metro de París, en el que algunos convoys funcionan sin conductor.

El director del Centro de Investigación del Transporte (TRANSyT) de la Universidad Politécnica de Madrid, Andrés Monzón, presentó aplicaciones y sistemas inteligentes en las que la integración de las TIC permite integrar la gestión del tráfico vial y el transporte público para gestionar mejor la movilidad en áreas urbanas. Este tipo de información permite reducir la congestión, la contaminación atmosférica y la emisión de gases de efecto invernadero.

Por su parte, el consejero técnico de Economía y Empleo del Ayuntamiento de Madrid,Enrique López Galán, habló del sistema de adquisición y explotación de datos(SAED), una herramienta que integra toda la información generada en las distintas etapas de gestión de los residuos sólidos urbanos de Madrid para poder luego ser utilizada para fines económicos y administrativos. Con mas de 3.340 toneladas diarias de entradas de residuos, el parque tecnológico de Madrid recupera más de 234 toneladas de materiales reciclables y genera más de 567 MWh al día e inyecta en la red gasista más de 16.574 Nm3 diarios de biometano. En este apartado, Martí Solà añadió que «la Comunidad de Madrid es un ejemplo mundial porque se gestionan los residuos urbanos y de aquí se obtiene una energía. Se tratan unos residuos que se valorizan y este es un ejemplo de hacia donde hay que ir».

El subdirector de Depuración y Medio Ambiente del Canal de Isabel II, Miguel Ángel Gálvez, señaló en su ponencia que la región también es una referencia en la instalación de microturbinas en las redes de distribución de agua de consumo humano. Un modelo de gestión inteligente a través de la generación distribuida de electricidad alcanzando una capacidad de producción superior a los 6.000 GWh al año.

Blanca Losada clausuró las ponencias del seminario. La directora de Ingeniería e Innovación Tecnológica de Gas Natural Fenosa analizó el despliegue de las redes inteligentes y de las tecnologías de generación eléctrica distribuida en las ciudades para mejorar la eficiencia y sostenibilidad de las mismas. En este contexto, señaló que estamos pasando de un sistema energético centralizado a un nuevo modelo en el que conviven múltiples recursos energéticos distribuidos que se integran en un sistema cada vez más descentralizado en la evolución de las ciudades.