La Comisión Europea se dispone a repartir de 50.000 millones de euros para financiar infraestructuras de producción, almacenamiento y transporte de hidrógeno renovable

En la lista provisional de proyectos figuran, como estaba previsto, el H2Med para transportarlo desde Portugal y España hasta Alemania, pasando por Francia, y otros siete proyectos españoles para electrolizadores y almacenamiento, así como cuatro nuevas interconexiones eléctricas con Francia y Portugal.

Estos ocho proyectos de hidrógeno verde en España figuran dentro de la lista de las 68 infraestructuras transeuropeas de esta energía a los que previsiblemente la Comisión Europea otorgará consideración de Proyectos de Interés Común (PCI), de modo que podrán recibir financiación comunitaria. Este lista provisional pasará por una nueva evaluación en Bruselas y se espera que sea anunciada oficialmente en breve. 

La Comisión elabora este listado de proyectos prioritarios cada dos años en base a las solicitudes que presentan los distintos gobiernos europeos y con él determina sus apuestas por distintos trazados o proyectos para incrementar las interconexiones energéticas entre los países de la UE. En la de 2024, que es de inminente aprobación, han entrado con fuerza las infraestructuras de hidrógeno renovable, mientras que «no hay ningún proyecto elegible» de gas, en línea con la negativa de Bruselas a financiar combustibles fósiles que el año pasado echó definitivamente por tierra el MitCat.

Además, el borrador de proyectos de interés comunitario para 2024 incluye interconexiones eléctricas entre distintos Estados miembros,  cuatro de ellas en España: para unir Fontefria con Vila Nova de Famalicao en Portugal; por el Golfo de Vizcaya, entre Gatica y Cubnezais; y otras dos a través de los Pirineos para unir con Francia, una desde Aragón hasta Marsillón y otra de Navarra a las Landas.

Tras conocer el borrador, organizaciones ambientalistas han criticado que los promotores de los proyectos que ahora podrían tener prioridad europea forman parte del sector de los combustibles fósiles, después de que la Comisión dejara claro que no financiaría más proyectos gasistas, tratando de captar fondos de la UE ahora con energías renovables. Según ha advertido la ong Food & Water Action Europe, el importe para ejecutar los 68 proyectos de hidrógeno será superior a los 50.000 millones previstos de financiación europea, de manera que, a la larga, terminará notándose en las facturas energéticas de los contribuyentes.

H2Med

De acuerdo con la lista provisional a la hemos tenido acceso  y tal y como esperaba el Gobierno y ya había sugerido la presidenta de la Comisión, Ursula von der Leyen, la canalización de hidrógeno renovable entre Portugal, España, Francia y Alemania conocida como H2Med figura en el primer lugar de las interconexiones de hidrógeno en Europa occidental que previsiblemente tendrá condición de PCI y fondos europeos. Precisamente, en diciembre del año pasado Lisboa, Madrid y París se apresuraron para presentar la candidatura del H2Med antes de que terminara 2022, para poder entrar así en la lista que se decidirá ahora, sobre PCI de 2024. 

En esta relación también hay nueve proyectos de amoniaco renovable, la alternativa al hidrógeno para descarbonizar la industria o el transporte marítimo que ya se empieza producir y vender también en España, pero ninguno de ellos es español. Tampoco hay ningún proyecto español en eólica marina, muy incipiente aún, ni para el despliegue de «redes inteligentes» de transporte de electricidad, una asignatura pendiente.

En concreto, el «corredor Portugal-España-Francia-Alemania» consta del tramo de infraestructura en Portugal, la interconexión entre Portugal y España y también la infraestructura interna en España, aunque se excluyen el ducto en Zamora (donde se uniría con Portugal) y el tramo de Guitiriz, dentro del trazado que ya ha ido diseñando el Gobierno dentro de España, con conexiones entre plantas productoras de hidrógeno verde y redes de transporte también por Gijón, Puertollano, Huelva, Cartagena, y Cantabria. 

También está previsto que se incluya en el PCI la conexión submarina entre España y Francia -el BarMar original entre Barcelona y Marsella- y, más allá de los Pirineos, la infraestructura interna en Francia para conectar con Alemania -excepto el tramo de Saint Martin de Cray-Cruzy- y la infraestructura interna en Alemania. 

La cifra que recibiría todo este proyecto no está concretada en el borrador porque, según apuntan fuentes conocedoras de estos trámites, la mera inclusión de un proyecto en la lista de PCI no es el final del camino, sino que todavía quedará «mucho trabajo» por hacer para concretarlo. En diciembre del año pasado, cuando España, Portugal y Francia cerraron el acuerdo político en torno al H2Med, cifraron el coste de esta canalización -sin contar entonces con infraestructura más allá de suelo francés- en 2.500 millones de euros. Entonces, la pretensión española era que la Comisión cubriera con fondos europeos al menos el 50% de este importe.

Producción y almacenamiento

Además de este megaproyecto de transporte de hidrógeno verde, otros siete ubicados en España y relacionados con otras fases también aspiran a entrar en la lista de CPI 2024 y tener parte de los 50.000 millones disponibles. 

Cinco son de proyectos de electrolizadores, el dispositivo clave para la producción de hidrógeno verde, para separar los dos átomos de hidrógeno que hay en cada molécula de agua por cada uno de ozono (H2O). La etiqueta de verde es porque la electricidad que se emplea para hacer esta separación procede de fuentes renovables, como la energía eólica o la fotovoltaica. Los candidatos españoles son una red de electrolizadores de hidrógeno en Tarragona, un electrolizador de gran escala en Bilbao y otro en Cartagena, el Valle del Hidrógeno Verde en Andalucía y otro en Asturias.

También aspiran a la clasificación como CPI los dos proyectos de almacenamiento de hidrógeno que prevé el proyecto interno del H2Med presentado por España en Bruselas, en Cantabria y en País Vasco.

La lista de candidatos españoles a PCI se cierra con otros tres infraestructuras de bombeo eléctrico, la alternativa renovable para almacenar energía hidroeléctrica, en Navaleo (León), en Los Guajares (Granada) y Aguayo (Cantabria).